jueves, 8 de enero de 2015

Enero


Enero es el mes de los vientos,

Los árboles danzan poseídos, alegres, retorciéndose,  dejándose llevar o simplemente sometiéndose a la fuerza y velocidad de éstos...

Para mi ese vaivén de los árboles es como una meditación en movimiento de la naturaleza que en un parpadeo me invita a incorporarme,  acoplarme a ese movimiento y formar parte de...
 
El viento susurra por todos los techos, ventanas, ranuras, hendiduras
Llega hasta mis oídos ese sonido tan bien conocido, los lóbulos bailan y se erizan "envientados"
Se cuela por mis  orificios nasales y sin más me alborota el cabello, me eleva la blusa y arrastra los cojines de mi terraza, rompe ramas, caen ramas, caen las conchitas... arrasa

El viento, los vientos, la banda Sonora de la quietud... sonido que me arrulla.

 
Del mismo modo el viento nos trae la magia de las burbujas de jabón, esas que alguna vez todxs perseguimos y en este alegre recuerdo alegre-melancólico "jabonudo" la coherencia me tira de la mano y me advierte que a como flotan hasta estallar esas burbujas de jabón,
también vuelan y se rompen techos, cielos rasos y tejas de muchos tejados...
Salgo así de mi arrullo sonoro de la quietud, de sentirme una bailando con todo y,

pienso en los barcos y pangas del Pacífico y del Atlántico que no han podido zarpar para cargarse con la pesca de sus “jinetes”…

No hay  pesca, no hay langosta, no hay sonrisas, no hay brete…

 

Escucho la música que me llega del bar de la rotonda Universitaria traída por el viento,

Me termino de mecer en la hamaca y cierro,

Hay un infierno en cada paraíso y un paraíso en cada infierno…

En Enero el único que gana es el viento…

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Distancia

  Cansada de abrazar la almohada y que no tenga ni la textura de tu piel ni tu olor, Cansada de sentir 10000kms de distancia entre cada un...